Pasaron unos ocho días y se hacia cada vez más notoria mi cojera, pero yo seguía sin sentir ningún dolor, entonces mi mamá optó por llevarme al médico porque aunque yo no me quejaba ella estaba muy preocupada.
El médico me examinó muy bien y le dijo a mi mamá que no se preocupara, que algunos niños reaccionaban de diferentes formas en su crecimiento y que de pronto yo sentía alguna molestia en las rodillas, pero que era tan leve que no alcanzaba a sentirla.
Mi mamá no se fue muy contenta para la casacón la respuesta del médico, pues pasados unos días insistió llevándome de nuevo al hospital porque la cojera se hacia cada vez más notoria, a esta vez me examinó otro médico quien ordenó unos rayos X para más seguridad, pero fue inútil porque el le dijo a mi mamá que no tenia nada raro.
Mientras pasaban los días yo notaba a mi papá y a mi mamá muy tristes y preocupados por mi problema, después de la última visita al hospital había transcurrido más o menos un mes y como el problema persistía mis padres me llevaron donde un ortopedista, pues casi no podía caminar.
El ortopedista revisó los rayos X y ordenó unos nuevos. Inmediatamente vio que la cabeza del fémur estaba gastada, en esta época ya solamente podía arrastrarme sentado porque me dolía mucho el pie izquierdo, el dolor era tan intenso que se llegó el día que ya me tenían que cargar para desplazarme de un lugar a otro.
Me siguieron llevando al ortopedista y me hizo un tratamiento de unos medicamentos bastante fuertes, mis padres les preguntaron si con esos medicamentos me aliviaría, él les contestó: “El único que lo puede todo está arriba, confiemos mucho en él y sean muy cumplidos ustedes en el horario de los medicamentos”.
Un día mi mamá amaneció muy contenta porque había tenido un sueño muy hermoso con el Divino Niño donde ella le pidió que yo me aliviara. Dos días después pude volver a arrastrarme por toda la casa porque el dolor ya no era tan fuerte, al poco tiempo volví a caminar, más adelanta a correr y a jugar con mis amigos, y aprendí que Dios lo puede todo.
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