Es en ese lugar, donde María Eugenia en su tiempo libre, se gana el pan de cada día, en colaboración con Guillermo su compañero de trabajo, de vivienda y padre de sus dos hijos. Desde ese lugar partimos Maria y yo rumbo a hogar y en esa visita podría conocer su entorno, entorno que está rodeado por árboles, pájaros, vacas y algunas casas frente a la de ella.
Ella vive en el Municipio de El Carmen de Viboral, para ser mas preciso en el corregimiento de Aguas Claras en el sector conocido como El Canadá y es allí, donde después de pasar por la tienda de Pacho, en la cual acostumbra comprar cosas para el desayuno, que me señala la casa de doña Rosario, en la cual hay un apartamento alquilado a una familia proveniente de la ciudad de Medellín, quienes trajeron con ellos a Daniel y Angélica, para llenar esa gran casa de color azul, de un poco de gritería, llanto, regaños y daños de un pedazo de felicidad, pedazo que lo es todo para la madre de ese hogar María Eugenia Durango Vera.
Cuando ingresé a la casa, ella me dirigió al apartamento donde viven, este es muy acogedor y cálido. Es aquel resguardo familiar encontré más allá de una cocina, trapera, escoba, una habitación, un televisor, un baño…hojas de cuaderno rayadas con dibujos, unos muy abstractos por cierto y otros con humanos realizados con “palitos y bolitas”, garabatos hechos por los hijos de Maria, en su cuaderno, el cuaderno que la acompaña de lunes a viernes ala Universidad de Antioquia, seccional oriente, guardando con recelo los conocimientos transmitidos en fotografía, expresión semiología, psicología, sociología y composición española, las materias que ve en su segundo semestre de comunicación social periodismo.
Maria en su apartamento es madre y compañera, por que cuida de sus hijos, en el trabajo lo es, por que allí se preocupa por alimentarlos y en la universidad lo demuestra ya que se preocupa por ofrecerles un futuro estable y uno para ella.
Entre papayas, mangos, naranjas, peras, manzanas, recopilados en un vaso con leche condesada, me alejo del lugar donde sigue vendiendo y trabajando una mujer integral.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Apórtele con su comentario a la formación profesional del autor en tono colaborativo, no de crítica moralista, censuradora o que descalifique su trabajo creativo.