Jorge Franco le presenta al los receptores escenas demasiadas crueles, violentas y de sexo de larga duración que acaban con la pasión de cualquiera, manifestándoles así a que sientan un sabor amargo, rabia, terror, tristeza… al observar esta película.
El ilustra la historia de una mujer sicaria que es violada cuando niña por su padrastro y que le colocan el apodo de Rosario tijeras porque ella le corta los testículos con una tijera a éste. Además se convierte en una persona que mata llena de rencor y sin escrúpulos a sus víctimas y que para ajustar a su archivo es dragadita.
En esta película se presentan escenas tales como:
Cuando a Rosario su propio hermano la vende para uso sexual a sus socios narcotraficantes, y ella para quede bien con ellos lo hace. Es difícil aceptar lo que pasa en esta escenas pero todavía en la actualidad estos hechos suceden en varios hogares colombianos. No obstante es ésta una de las tantas escenas que le critico a Jorge franco, puesto que es tan cruel que lo receptores se entristecen, como ya se dijo anteriormente sienten un sabor amargo y a la vez rabia por ver como venden a las mujeres como si fueran un objeto.
Por otro lado se manifiesta el sexo de una manera tan salvaje y morbosa no solo por como hacia Rosario estas acciones con sus amantes, sino como lo expresaba con Emilio, quizás el hombre que sentía amor por ella. Así el autor hizo que estas formas de placer acabaran con la pasión de cualquiera y que por un momento pensaran asquerosamente de los actores (Emilio) Manolo Cardona y (Rosario) Flora Martínez.
Además los diálogos eran tan vacios, sin emotividad, llenos de rencor y de vulgaridades que hacían que la película se sintiera larga, aunque no lo es.
A diferencia de lo anterior otra escena que se me es importante mencionar y criticar pero en especial a Jorge Franco porque me asombro, me impacto y me hizo reír fue cuando mataron al hermano de Rosario y que después de muerto lo vistieron con su ropa de roquero y lo engafaron para disimular que no vivía, entonces lo pasearon en un carro por las calles de Medellin en donde iba rodeado de sus amigos y hermana, los cuales iban llorando, riéndose y bebiendo. Después lo llevaron a una discoteca en donde una mujer completamente desnuda le bailo y todos sus acompañantes celebraban y cuando se acabo el show fue que lo llevaron a enterar.
Es chistoso lo anterior, por lo menos yo nunca había visto que a una persona muerta le hicieran semejante espectáculo. De pronto el autor a través de este hecho pretendían que los observadores por un momento dejaran de sentir lo violento y atroz de la película, haciéndolos reír como me paso a mí al observarlo.
Finalmente esta dolorosa semblanza de unos hechos tan aterradores, violentos y sin escrúpulos como nos muestra Jorge Franco en la historia de Rosario tijeras, deja una enseñanza para todas aquellas personas colombianas que práctican los mismos actos, para que así reflexionen y se den cuenta que todos estos hechos sólo los lleva a un futuro desagradable como el de Rosario que quedo luchando entre la vida y la muerte en aquel hospital después de haber recibido un disparo.
Querida amiga, no quisiera corregirte yo, pero en mi consideración te faltaron más argumentos, no sé no siento que estuvieses argumentando criterios sino más bien contando la historia
ResponderBorrarme parece que hubiera sido mejor si especifiras un poco más.
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